Distinguen a Alta Gracia por las famosas “revolcadas” de San Simón de Guerrero

Saúl Suárez

San Simón de Guerrero, México. En el marco del 139 aniversario de la fundación de este pintoresco municipio del sur mexiquense, la señora Alta Gracia Maruri Ramírez recibió un reconocimiento público por sus más de 20 años dedicados a la elaboración y venta de antojitos mexicanos en la Cabecera Municipal, destacando entre ellos las ya tradicionales “revolcadas”.

Fue durante la ceremonia oficial donde se dieron cita funcionarios estatales y municipales, así como ex presidentes municipales y habitantes, que la señora “Altita”, -como mejor le conocen en San Simón de Guerrero-, recibió este importante reconocimiento que también le fue otorgado a otros habitantes que destacan en otros ámbitos, como el deportivo y educativo.

En la reseña histórica se dio a conocer que las famosas revolcadas, elaboradas con bistec, chorizo, huevo y queso, son el fruto de una ocurrencia que se tuvo hace unos cinco años, cuando un cliente solicitó a la señora Alta Gracia le preparara un taco con esta combinación, y ante el éxito que se tuvo al ofrecerse a otras personas, en el modesto puesto instalado en el primer cuadro se volvió una costumbre y después una tradición vender las famosas revolcadas.

En la actualidad, este alimento que se acompaña con tortillas a mano y una salsa especial, es uno de los antojitos más tradicionales y con mayor demanda en la demarcación, mismo que es degustado por funcionarios, taxistas, deportistas y por la población en general, inclusive ha logrado tanta popularidad que muchos le consideran como uno de los alimentos obligados a consumir para quienes acuden a este lugar.

Cabe agregar que la comerciante también recibió el reconocimiento en mención por el ejemplo que da a la población en el sentido de trabajar y perseverar para lograr un objetivo, pues diariamente se trasladada hasta este punto para poner en funcionamiento su negocio en el que además de brindar un servicio de primera necesidad, también genera fuentes de empleo; de esta forma, doña “Altita”, siempre con una sonrisa y actitud positiva recibe y atiende a sus clientes.