
Redacción El Monitor
Migrantes se aferraban a sus teléfonos celulares atentos a la aplicación CBP que mostraban que, después de varios meses de espera, finalmente tenían citas para entrar legalmente al país Norteamericano.
Ahora, fuera de varios cruces fronterizos en el norte de México —donde laberintos de muros de concreto y gruesas vallas eventualmente desembocan en Estados Unidos— la esperanza y la emoción se convirtieron en desesperación e incredulidad momentos después de que el presidente Donald Trump asumió el cargo.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus iniciales en inglés), anunció que la aplicación CBP One, que apenas, ya no sería utilizada para permitir el ingreso de migrantes, luego de que el servicio facilitó la entrada de casi 1 millón de personas desde enero de 2023.
Decenas de miles de citas que estaban programadas hasta febrero fueron canceladas, se les informó a los solicitantes.
En Tijuana, donde a diario se admitía a 400 personas en la aplicación en un cruce fronterizo con San Diego, de igual forma la decepción, tristeza y desconsuelo, la aplicación había sido cerrada.
La app de CBP One ha sido extremadamente popular, especialmente entre los venezolanos, cubanos, haitianos y mexicanos. Ahora, todos ellos estaban varados en la frontera con Estados Unidos o en otras partes del territorio mexicano.
Las personas que tenían cita por la mañana pasaron según lo programado. Andrum Román, un venezolano de 28 años, fue parte del último grupo que cruzó la frontera con una cita de CBP One en Ciudad Juárez, del otro lado del río Bravo con El Paso, Texas.
Antes de entregar sus documentos expresó que se sentía un poco más seguro ya en territorio estadounidense, pero aún se veía abrumado por la incertidumbre.
CBP One es prácticamente un sistema de lotería que otorgaba mil 450 citas al día en uno de ocho cruces fronterizos. Las personas entran a Estados Unidos bajo un permiso condicional, un poder presidencial que el exmandatario Joe Biden utilizó más que cualquier otro presidente desde que se introdujo la medida en 1952.
Su desaparición se apega a las promesas de campaña de Trump y complacerá a los detractores de la medida, quienes la consideran un imán excesivamente generoso que atrae a las personas hacia la frontera entre México y Estados Unidos. La noticia del abrupto final de CBP One conmocionó a los migrantes en todo México.
Comments