A 35 años del "Tejupilcazo", rinden homenaje a los defensores de la democracia

Redacción El Monitor

Tejupilco, México. “A nuestros compañeros caídos en la lucha, la gloria eterna; a quienes sobrevivimos, que Dios nos obsequie cada mañana el aliento de vida, para que con nuestros actos honremos la memoria de nuestros muertos”, ¡QUE ESTO NUNCA SE OLVIDE!!! 12-dic- 1990, 12-DIC-2025.

Con este mensaje, a modo de plegaria, el ingeniero Guillermo González Hernández rindió homenaje póstumo a los caídos en la lucha por la democracia en México, al tomar la palabra durante la guardia de honor realizada por ex alcaldes, ex diputados, activistas y luchadores sociales de la región sur del estado de México, la mayoría de ellos, protagonistas del episodio postelectoral de 1990, el famoso “Tejupilcazo”.

Con una ofrenda floral y un minuto de silencio se ofreció el recuerdo y reconocimiento a la memoria de quienes entregaron su vida desde distintas trincheras para fortalecer y afianzar el desarrollo democrático en el país, considerando que lo sucedido en Tejupilco en esa época fue la raíz de muchos cambios estructurales y realmente transformadores, creándose mecanismos más transparentes y acordes para respetar la voluntad ciudadana, como el Instituto Nacional Electoral, surgido años más tarde de aquel infausto episodio que ha trascendido hasta nuestros días a través de la historia local.

Y aunque pareciera que se diluye entre las actuales generaciones, los protagonistas de aquella reyerta recordaron entre risas y nostalgia a muchos de los participantes, quienes tomaron rumbos diversos y ahora solo viven en la memoria; cada uno de los presentes compartía algún anécdota de aquel día 12 de diciembre de 1990, cuando los tejupilquenses acusaban fraude electoral y cumplían un mes de tener sitiada la presidencia municipal, realizando un plantón permanente de hombres y mujeres de todas edades dispuestos a defender el valor de sus votos, pues a decir de ellos habían sido manipulados en las urnas para arrebatarles el triunfo en la elección local.

Otros jóvenes presentes recordaban vagamente el suceso, uno de ellos comento sobre la imagen de un caos en la plaza que el apenas y logro distinguir pues las bombas de gas lacrimógeno le lastimaron mucho los ojos y solo atino a correr hacia un sitio seguro, era un niño de apenas 10 años y poco entendía de política.

Protagonistas de aquella refriega ocurrida hace 35 años, acuden cada año a recordar aquel zafarrancho que conmocionó la vida política de la región y el Estado de México en general, pues por sus consecuencias fue un suceso que acaparó espacios en los noticieros y medios nacionales e internacionales, aunque las versiones fueron manipuladas e imprecisas, según testigos.

Con el tiempo la historia les ha ido dando la razón a unos y otros; revelándose poco a poco las verdades, sobre aquel fraude electoral fraguado en contra del candidato del PRD a la presidencia municipal de Tejupilco, Guillermo González Hernández; posteriormente fue diputado local, distinguido como incansable luchador social en la región y principal promotor para la creación del municipio de Luvianos; exiliado en Canadá, tras considerarlo perseguido político del gobierno mexiquense.

Justo por ese exilio estuvo ausente en varias de las ceremonias conmemorativas, pero esta vez llegó con su breve mensaje para recordar con el resto de los asistentes varios aspectos relevantes de ese 12 de diciembre de 1990 cuando acudió a esta localidad el senador Heberto Castillo para dar ánimos a los campesinos quienes cumplían varias semanas en plantón frente al palacio municipal, exigiendo respeto a la voluntad popular, solicitándole a las autoridades electorales revisión del proceso, pues fueron muchas las irregularidades planteadas y demostradas incluso gráficamente con las oportunas tomas realizadas por el profesor Alejandro Cruz Gómez, donde claramente se comprobaba la manera en como habían manipulado la votación los del Partido Revolucionario Institucional.

Las fotografías de Alejandro Cruz Gómez muestran además la marginación imperante en la zona y también existen las gráficas tomadas por el foto-periodista Julio Cesar Zúñiga, quien registró oportunamente el drama del enfrentamiento y los cuerpos ensangrentados y sin vida de los policías caídos en la refriega, así como el de un campesino muerto cuyo rostro fue cubierto con una bandera del PRD.

El reto actual, dijeron, es explicar a las nuevas y futuras generaciones sobre ese episodio, sus orígenes y consecuencias, pues aquel día significó para la región un cambio total en toda la extensión, pues a partir del suceso trágico, muchos ojos pusieron atención en la zona y fue abriéndose una brecha de oportunidades y soluciones a los miles de problemas y necesidades enfrentadas por la población.

Y aunque todavía falta mucho por atender, los líderes reconocieron los avances en varios rubros, pero advirtieron de muchos otros problemas que persisten, entre ellos la falta de apoyos reales al campo, causa origen del abandono paulatino de tierras, obligando a los trabajadores a emigrar a Estados Unidos, pues por mayor esfuerzo que pongan, dijeron, aquí no resulta rentable ni productivo sembrar ningún producto. Sin embargo, muchos hombres y mujeres siguen en busca de oportunidades en el sur y por ellos se debe continuar alzando la voz para exigir la tan anhelada justicia social, por la cual, expresarón, en estas tierras del sur mexiquense se lucha día con día.