
Arturo Callejo
Ocoyoacac, México. En la cabecera municipal de este municipio mexiquense, se reunieron al menos 100 personas para hablar con su presidenta municipal, Anallely Olivares Reyes y exigirle se haga justicia entorno a un cuádruple asesinato registrado el domingo pasado, a la par de pedir seguridad para todo el municipio.
Sin embargo, una vez que se enteraron de que su presidenta municipal se había ido del ayuntamiento, enojados y armados con palos y piedras, rompieron los vidrios de la fachada del palacio municipal y vandalizaron sus muros.
En una manta que extendieron en la pequeña plaza, se exigía justicia para América, Mateo, Paola y Rafael, quienes fueron ejecutados y sus cuerpos localizados al interior de una vivienda ubicada en la calle de Juan de Dios, 16, en el barrio de San Miguel.
Estas cuatro personas, dos hombres y dos mujeres, integrantes de una familia, fueron halladas ejecutadas el domingo anterior y de los asesinos no se sabe su paradero.
Ya con los ánimos “caldeados”, el centenar de comuneros de Ocoyoacac, exigen que la Guardia Nacional se haga cargo de la seguridad del municipio, pues no confían en su policía municipal, incluso, al sitio sí llegaron elementos federales, pero no pudieron regresar el orden a la cabecera municipal.

A su vez arribó también personal de gobernación estatal, sin llegar a un acuerdo con los pobladores que amenazaron con tocar las campanas para reunir a más gente y tratar de quemar la alcaldía de Ocoyoacac.
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