Redacción El Monitor
Toluca, México. Familiares de los trabajadores de una pollería que fueron levantados en Toluca, se manifestaron afuera del Palacio de Gobierno en la capital mexiquense, para exigir que sean localizados.
Aunque ya hay cuatro detenidos por este hecho delictivo, las autoridades aún no logran ubicar sanos a los cuatro polleros, víctimas de la delincuencia organizada, por lo que debe existir la intervención del gobierno de México para su rescate, demandó la dueña del establecimiento donde ocurrieron los hechos y los familiares de las víctimas.
Durante una segunda protesta efectuada este lunes a las afueras de Palacio de Gobierno, destacó wur ya han transcurrido 53 días de los hechos.
En conferencia de prensa, familiares de las víctimas insistieron a las autoridades a continuar con ka búsqueda para y encontrar a Rigoberto, Eliseo, Jaime e Isidoro, porque sobre su paradero no se les ha dado información.
La empresaria, Karina reconoció la detención de cuatro personas, de las cuales únicamente identifican a una como la que participó en la privación ilegal de la libertad de los trabajadores en una bodega de Parques Nacionales en la capital mexiquense el pasado 22 de diciembre.
Reveló que las extorsiones continúan para el gremio, por lo que otros compañeros se han solidarizado con ellos y han comenzado a levantar las denuncias correspondientes.
Indicó que del momento en que desaparecieron familiares, compañeros y propietarios no han recibido llamadas para su rescate.
Acerca de las personas detenidas que están vinculadas a este caso, aclaró que no son las personas que aparecen el video, sólo el chofer que se llama Angel N, explicó.
“Seguimos trabajando con el temor de que volvamos a sufrir un atentado en contra del negocio y lo más importante en contra de los trabajadores que van a trabajar con medio no tenemos una patrulla o un policía para cuidarnos”.
El pasado 22 de diciembre de 2023, cuatro trabajadores de una pollería fueron reportados como desaparecidos luego de que presuntamente un grupo armado arribó al sitio, ubicado en la Nueva Oxtotitlán, los amedrentaron y los subieron contra su voluntad a una camioneta.
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